Novena a San Judas Tadeo. Día 9.
Novena a San Judas Tadeo - Día 9: Poder de San Judas
Noveno día y último de la Novena a San Judas Tadeo: Concluye esta poderosa oración pidiendo la bendición final del santo de las causas imposibles. En este noveno día, entrega tus preocupaciones a su intercesión, confiando en su apoyo para superar cualquier desafío que enfrentes. ¡Ora con fe y gratitud profundas!
Por la señal de la Santa Cruz, de
nuestros enemigos líbranos Señor Dios Nuestro. En el nombre del Padre, del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
ORACIÓN INICIAL
Dios todopoderoso y eterno, te damos gracias por
habernos dado a San Judas Tadeo, apóstol y mártir, como intercesor especial en
nuestras necesidades. Te pedimos que, por su intercesión, podamos alcanzar las
gracias que tanto necesitamos. Amén.
MEDITACIÓN:
EL PODER DE SAN JUDAS TADEO
San
Judas Tadeo es conocido como el patrón de las causas imposibles, porque su
intercesión ante Dios ha sido fuente de innumerables milagros y favores concedidos.
Este poder no proviene de él mismo, sino de su íntima unión con Cristo, quien
le ha concedido la gracia de ser un poderoso intercesor. San Judas, con
humildad y fe, ha llevado a muchos a experimentar la misericordia y el poder de
Dios en sus vidas, especialmente en los momentos de mayor desesperación.
En
este último día de la novena, reflexionemos sobre el poder de San Judas Tadeo
para interceder por nosotros ante Dios. Pidámosle que, con su poderosa
intercesión, nos ayude a recibir las gracias que tanto necesitamos y a confiar
siempre en el poder de Dios para obrar en nuestras vidas.
ORACIÓN A SAN JUDAS TADEO
Glorioso San Judas Tadeo, apóstol
poderoso y amigo fiel de Jesús, te pedimos que intercedas por nosotros con el
poder que Dios te ha concedido. Que, al igual que tantos otros, podamos
experimentar tu ayuda en nuestras necesidades más apremiantes y recibir las
gracias que necesitamos para seguir firmes en la fe.
Oh San Judas, que tu ejemplo nos
inspire a confiar siempre en el poder de Dios, sabiendo que para Él nada es
imposible. Ayúdanos a mantener la esperanza en medio de las pruebas, seguros de
que con tu intercesión podemos superar cualquier dificultad. Amén.
PADRENUESTRO, AVEMARÍA Y GLORIA
Padrenuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también
nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y
líbranos del mal. Amén.
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la
hora de nuestra muerte. Amén.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el
principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
ORACIÓN FINAL
San Judas Tadeo, apóstol y mártir glorioso, siervo
fiel y amigo de Jesús, el nombre del traidor ha sido causa de que seas olvidado
por muchos, pero la Iglesia te honra y te invoca universalmente como el patrón
de los casos desesperados y de las causas imposibles.
Ruega por mí, que soy tan miserable; haz uso, te lo
ruego, de ese privilegio particular que se te ha concedido de socorrer visible
y prontamente cuando casi se ha perdido toda esperanza. Ven en mi ayuda en esta
gran necesidad, para que pueda recibir el consuelo y el socorro del cielo en
todas mis necesidades, tribulaciones y sufrimientos, particularmente (mencionar
aquí la petición), y para que pueda bendecir a Dios contigo y con todos los
elegidos por toda la eternidad. Amén.
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